El reconocido visionario tecnológico Balaji Srinivasan, ex socio general de Andressen Horowitz y ex director de tecnología de Coinbase, explica por qué los políticos se equivocan sobre internet, que evolucionó a un campo global de colaboración y competencia simultáneamente. Srinivasan señala que solo China y las criptomonedas representan ejemplos prácticos de la correcta percepción del impacto y las oportunidades de internet, aunque con enfoques radicalmente opuestos.
El reconocido visionario tecnológico Balaji Srinivasan, ex socio general de Andreessen Horowitz y ex director de tecnología de Coinbase, tiene una perspectiva fascinante sobre cómo el mundo está respondiendo a la revolución del internet. Srinivasan sostiene que ningún movimiento político, ya sea socialista o nacionalista, ha logrado un marco adecuado para lidiar con internet, ya que sus ideas surgieron en un contexto tecnológico completamente diferente.
Según Srinivasan, «Internet es un mercado globalmente integrado, y realmente todos están en competencia (¡y colaboración!) entre sí. Después de todo: tus seguidores son globales, tus clientes son globales, tu cadena de suministro es global y tus contratistas son globales. Miles de millones de personas lo hacen…»
Mientras tanto, internet ya ha establecido conexiones sociales más poderosas que las ideologías e incluso que los estados-nación. Las redes sociales digitales representan diseños de interacción humana más influyentes en comparación con los limitados por las fronteras estatales.
En este sentido, Srinivasan sostiene que solo China y las criptomonedas representan ejemplos prácticos de la correcta percepción del impacto y las oportunidades de internet: «Hay, sin embargo, dos facciones que se toman en serio a Internet: China y Crypto. Porque tienen el Gran Cortafuegos y la Blockchain respectivamente. Estos son tipos muy diferentes de fortificaciones que ambos tratan al reino digital como algo que debe ser defendido, amurallado y protegido».
Mientras que China, con su Cortafuegos, apunta a la integración vertical de la sociedad digital al hacer que sus ciudadanos usen solo aplicaciones chinas y restringir el acceso a sitios web globales, el segmento de las criptomonedas aborda la creación de software tan seguro que pueda ejecutarse de forma abierta en todo el mundo.
De esta manera, para Balaji Srinivasan, China representa al socialismo nacionalista, mientras que el crypto representa al capitalismo internacional.
Además, Srinivasan ha señalado que tanto Bitcoin como la IA ya han entrado en fases verticales de sus curvas de adopción, superando incluso el ritmo de crecimiento inicial de internet. El ex CEO de Phunware, Alan Knitowski, también ha notado que Bitcoin podría estar creciendo más rápido que internet en términos de trayectoria masiva de adopción global.
En resumen, la visión de Balaji Srinivasan plantea una fascinante dicotomía entre los enfoques contrastantes de China y las criptomonedas frente al poder transformador de internet, con implicaciones profundas para el futuro del capitalismo y la competencia global.
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